El primer ministro, Benjamín Netanyahu, atacó a la izquierda, a los medios de comunicación, y al teniente general (de la reserva) Benny Gantz, líder del partido Azul y Blanco (Kajol Laban), durante un discurso de lanzamiento de campaña del Partido Likud de cara a las elecciones del 9 de abril.
“La victoria no está garantizada, no va a ser simple”, dijo el primer ministro a las bases del partido, y acusó al partido Azul y Blanco de estar ocultando, lo que denominó como, sus posiciones izquierdistas.
“Ellos dicen ‘nosotros no somos ni derecha ni izquierda, no existe más derecha e izquierda’. ¿Ustedes compran eso? Si hablan como izquierda, piensan como izquierda y actúan como izquierda: son izquierda”, apuntó Netanyahu.
El primer ministro añadió que sus grandes logros durante su actual mandato han sido ignorado por los medios de comunicación que “difunden propaganda en mi contra, esa misma televisión le lava el cerebro a la gente todas las noches”.
Netanyahu también criticó a Gantz por su supuesto pobre talento verbal, diciendo que a diferencia de su rival político, él “habla desde el corazón y no lee ningún guión escrito”.
El primer ministro alegó que Gantz y Lapid formarán una coalición con los partidos árabes, porque ellos rechazaron formarla con él y con el Likud.
En respuesta, Azul y Blanco manifestó que Netanyahu “continúa incitando y mintiendo”, y que el primer ministro está dispuesto a decir cualquier cosa para desviar la atención del público sobre las investigaciones en su contra.
El fiscal general, Avichai Mandelblit, anunció recientemente sus intenciones de imputar a Netanyahu por fraude, soborno y abuso de confianza, una decisión que depende del resultado de una audiencia en la que el primer ministro podrá hacer su descargo.