El presidente sirio, Bashar Al-Assad, ha afirmado que Israel intenta desplazar y expulsar a los cristianos de Oriente Medio, en una maniobra para hacerse pasar por protector de la minoría religiosa de la región.
Según la Agencia de Noticias Árabe Siria (SANA), Assad organizó la semana pasada una Conferencia Eclesiástica Internacional de tres días en la capital, Damasco, bajo el lema “La Iglesia es una casa de amor”. A ella asistieron representantes de asociaciones e instituciones humanitarias, sociales y de desarrollo, especialmente de la comunidad cristiana de Siria.
Al parecer, el sábado afirmó ante los asistentes a la Conferencia que “el desplazamiento de los cristianos es un objetivo principal de los planes externos para la región, pero es principalmente un objetivo israelí”. Beneficia a Israel, afirmó, “cuando los países de la región se dividen en diferentes estados sectarios, cada uno con un solo color… Por lo tanto, mantener la textura de la región y su identidad diversa son una necesidad que debemos defender.”
Assad también insistió en que “el ciudadano cristiano en Siria no es un invitado, ni un ciudadano de paso, sino un socio, y el título de esta asociación es el trabajo y la producción.”
El régimen sirio lleva mucho tiempo intentando cortejar a las minorías, como la comunidad cristiana del país, en un esfuerzo por presentarse como su único protector viable contra la amenaza de los grupos militantes religiosos islámicos, especialmente a lo largo de la guerra civil que dura ya una década.
Assad también ha trabajado para construir esa imagen de protector laico de los cristianos sirios para presentarla a las naciones occidentales. Sin embargo, esa imagen ha sido impugnada por muchos a lo largo de los años, ya que los grupos de derechos han denunciado que el propio régimen ha destruido o dañado intencionadamente más de 124 iglesias a lo largo de la guerra y que ha detenido al menos a cientos de ciudadanos cristianos.
Sin embargo, la afirmación del presidente sirio sobre la persecución israelí contra los cristianos no es del todo infundada, ya que Tel Aviv y los extremistas judíos han atacado a los cristianos -tanto de la comunidad palestina como de la ortodoxa griega- en todo Israel y en los territorios palestinos ocupados, y han intentado apoderarse de lugares sagrados y propiedades cristianas.