La actuación en los Oscar de Lady Gaga y Bradley Cooper llena de complicidad y emoción sigue dando que hablar. Ha sido ahora la exesposa del actor y director de Ha nacido una estrella quien ha opinado. “¿Hay alguna posibilidad de que estos dos no estén f∗∗∗∗∗∗∗?”, escribió Jennifer Esposito seguido de un sencillo comentario: “Ja”. El mensaje del que se hizo eco primero la cuenta de famosos Comments by Celebs y acumula decenas de me gusta y Esposito todavía no lo ha borrado.
Esposito y Cooper solo estuvieron casados durante cuatro meses en 2007. Desde entonces, la actriz se ha mostrado crítica con Cooper en al menos una ocasión. En una biografía que publicó en 2014 y en la que hablaba sobre su experiencia como celíaca, Esposito escribió que Cooper era “divertido, chulo, arrogante y un maestro de la manipulación”.
Según se hizo eco entonces US Weekly, Esposito decía que “no le encontraba necesariamente atractivo”, pero que decidió aguantar sus disparates durante un tiempo porque disfrutaba de su sentido del humor. La actriz también acusó a Cooper de tener “un lado frío y malvado” y que su relación giraba siempre en torno a él, “lo que él necesitaba y nada más”.
Tras la reciente ruptura de Gaga con su exprometido Christian Carino y las teorías de los fans de la cantante y de Cooper, los rumores en torno a un supuesto romance secreto no van a hacer otra cosa que aumentar.
Pero Cooper ha demostrado su devoción por Irina Shayk. Con ella y rompiendo sus normas se paseó por la alfombra roja previa a los Oscar y Lady Gaga ocupó una localidad junto a la pareja. Durante la gala se vio a ambas comentando lo que sucedía en el escenario y a la modelo abrazándola cuando se supo que había ganado un Oscar.
Lo que Lady Gaga y Bradley Cooper no niegan es la química que existe entre ellos. Todo comenzó en la casa de Lady Gaga en Los Ángeles, como contó Bradley Cooper en el set del show de Conan en TBS el 23 de septiembre. “Fue una locura”, recuerda. “Tan pronto como abrí la puerta de mi casa y le vi, dije: ‘¿Tienes hambre?’. Somos dos italianos de la costa este. Así que nos calentamos una pasta del día anterior”. La estrella del pop luego animó al actor a cantar en su sala de estar. Cooper estaba nervioso por hacerlo ante ella, ganadora de seis Grammy. “Lo escuché cantar y me detuve en seco”, contó Lady Gaga. “Supe que podía encarnar a una estrella del rock. De hecho, es incluso el único actor en este planeta que podría hacerlo”. El dúo funcionó maravillosamente. “La química era tan obvia y tan fluida que fui a [la productora] Warner Bros al día siguiente y les mostré el vídeo de nuestro dúo”, desveló Cooper. De este momento casi místico nace la admiración, la confianza y el respeto mutuo sin límites entre ellos. Lady Gaga le animó a tomar lecciones de canto (él también aprende piano y guitarra). Y Cooper la ayudó en la preparación de su personaje, según contaron a The New York Times en otoño.
La pareja cree que haberse quitado las corazas y haberse mostrado vulnerables también les acercó. Cooper habló de su dura batalla contra su adicción al alcohol y las drogas. La película es su mayor confesión personal porque todo en ella habla de él: desde su visión del arte corrompido por el negocio, a la lucha contra las adicciones y la idea de que el amor no lo cura todo. Lady Gaga ha abordado en la película y fuera de ella sus fantasmas del pasado relacionados con un físico que no le gustaba y los abusos que sufrió siendo niña, según desveló en una entrevista a The Hollywood Reporter. “Tengo una amiga para toda la vida”, ha confesado sobre la cantante Bradley Cooper.