Jorge Ramos, periodista de Univision, fue retenido junto a su equipo durante dos horas y media en el Palacio Presidencial de Miraflores, en Caracas, después de que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, abandonase una entrevista que le estaban haciendo porque, según Ramos, no le gustaron las preguntas. El periodista denunció que le requisaron el material grabado y que se quedaron con la entrevista. Ramos añadió que los “encerraron en un cuarto de seguridad, apagaron las luces” y les “arrancaron los celulares”.