Al menos 22 personas han muerto este domingo tras el paso de dos tornados en el Estado de Alabama, al sur de Estados Unidos, en una jornada trágica, con un número de desaparecidos aún incierto y heridos muy graves trasladados a hospitales. La localidad más afectada fue el condado Lee, en la frontera con el Estado de Georgia, según confirmó el alguacil Jay Jones. Doce de los fallecidos eran del mismo poblado, Opelika. “Tenemos un área bastante importante de daños”, dijo Jones a la cadena CNN.
Jones calificó de “catastróficos” los daños provocados por la tormenta. El Centro Médico del este de Alabama ha informado de que atiende al menos a 40 personas heridas por el tornado. Los médicos han confirmado a la cadena NBC que no descartan que esta cifra aumente en las próximas horas. Las autoridades también han advertido de que la cifra de muertos puede crecer a lo largo de la noche. La franja de destrucción causada por el tornado es de unos 400 metros de ancho.
Un total de 150 de personas, según The New York Times, se encontraban en la zona de Lee en labores de rescate. Este domingo por la tarde hubo alerta por tornados también en Georgia, Florida y Carolina del Sur. Una decena de tornados tocaron tierra en Alabama y Georgia, de acuerdo con el Servicio Nacional Meteorológico. Kay Ivey, gobernadora de Alabama, anunció que ha sido extendido el Estado de Emergencia emitido el pasado 23 de febrero. Este domingo más de 40.000 hogares y comercios sufrieron cortes de energía en los dos Estados.
Este domingo ha sido la jornada más mortífera ocasionada por tornados en dos años. El 22 de enero de 2017, 16 personas murieron por fenómenos similares en Georgia. El 21 de mayo de 2013 el paso de un gigantesco tornado por Oklahoma City dejó 91 muertos y más de 140 heridos. Sin embargo, el más mortífero en medio siglo arrasó Joplin, Misuri, en mayo de 2011 dejando 116 personas fallecidas y estragos millonarios.