Solemos relacionar las dietas con la pérdida de peso, sin embargo, existen algunas diseñadas con otro propósito. Un buen ejemplo de ello es la dieta antioxidante, que busca frenar el envejecimiento del organismo con resultados no solo visibles por fuera, también por dentro.
Y es que nuestros órganos también envejecen. Para cuidarlos y mantenerlos jóvenes durante más tiempo, debemos apostar por un estilo de vida saludable (no fumar, no beber, descansar bien, ser activos…), pero también en la alimentación encontramos la clave. Los alimentos óptimos para una dieta antioxidante tienen características comunes: suelen ser ricos en vitaminas, fáciles de digerir, con un alto contenido de agua y bajos en grasas. ¿Cuáles son los más destacados?
5 ALIMENTOS PARA TU DIETA ANTIOXIDANTE
- Naranjas: Las naranjas son uno de los alimentos más indicados para una dieta antioxidante. Esto es debido a su alto contenido en vitamina C, imprescindible para proteger nuestras defensas y sintetizar la hemoglobina. Gracias a esta síntesis, el oxígeno llega hasta las células, consiguiendo así frenar el envejecimiento celular y el estrés oxidativo. 100 gramos de naranjas contienen 50 mg de vitamina C.
- Almendras: Como es bien sabido, los frutos secos son un dechado de virtudes nutricionales, sobre todo si hablamos de algunos nombres en concreto. En este caso, las almendras triunfan en cualquier dieta antioxidante, pues son ricas en vitamina E (24 mg) y nos ayudan a evitar el envejecimiento celular, reducir el colesterol, controlar el nivel de azúcar en sangre y reducir el hambre bajando el consumo general de calorías.
- Salmón: El salmón es un pescado rico en grasas saludables, entre ellas el Omega-3. Gracias a este, podemos elevar la cantidad de antioxidantes endógenos, los cuales reducen los radicales libres contenidos en el organismo y nos ayudan a frenar el envejecimiento celular. Además, tienen un efecto antiinflamatorio que podría ser muy beneficioso para luchar contra ciertas enfermedades o estimular el rendimiento físico.
- Chirimoya: Esta fruta es rica en fitoesteroles, otro nutriente clave en una dieta antioxidante. Esta sustancia natural de origen vegetal bloquea la absorción del colesterol, tiene propiedades anticancerígenas y ayuda a prevenir las enfermedades cardiovasculares.
- Zanahoria: En las zanahorias encontramos betacaroteno, un tipo de pigmento que es precursor de la vitamina A, regenerativo y antioxidante. Esta combinación nos ayuda a proteger el sistema inmunitario, mantener la piel joven y reducir el estrés oxidativo.
ALIMENTOS PROHIBIDOS EN UNA DIETA ANTIOXIDANTE
Para saber qué alimentos debes desterrar de tu dieta antioxidante simplemente debes aplicar la lógica. Es decir, rechaza aquellos que son ricos en azúcares, grasas y aditivos alimentarios. La bollería industrial, los refrescos, los alimentos procesados, las carnes ricas en grasas y el café son enemigos de las dietas antioxidantes, sobre todo si se consumen en exceso.
En contraposición, mantente bien hidratado, haz ejercicio diario y lleva un estilo de vida equilibrado y saludable, así estarás más cerca de convertir una dieta antioxidante en un modo de vida para cuidarte más y mejor por dentro y por fuera.